¿Qué comunidades autónomas lideran la inversión pública en tecnología?

Según los datos de TendersTool, entre enero y noviembre de 2025 la inversión pública en TIC traza un mapa donde Madrid, Andalucía y Catalunya encabezan el importe adjudicado, mientras el resto de comunidades se mueve en cifras más contenidas, aunque con apuestas bien definidas. La lectura de estas adjudicaciones no sirve solo para medir quién invierte más, sino para entender qué prioridades tecnológicas está marcando cada territorio..

 

Entre enero y noviembre de 2025, la administración española y las comunidades autónomas han adjudicado contratos TIC por más de 4.000 millones de euros, según TendersTool / AdjudicacionesTIC. En total se contabilizan 11.921 adjudicaciones: el mayor volumen corresponde a la Administración General del Estado (AGE, Red.es y organismos nacionales), con 1.254 millones, mientras que Andalucía, Madrid y Catalunya destacan como los grandes polos autonómicos. El gasto se ha concentrado sobre todo en infraestructura de red, software de seguridad, servicios de consultoría y proyectos de digitalización en sanidad y educación. De cara a 2026, el mercado apunta a un mayor protagonismo de la automatización y la inteligencia artificial.

Gasto por comunidades

El reparto de adjudicaciones evidencia diferencias muy marcadas entre la Administración central y los gobiernos autonómicos. Hasta noviembre de 2025 la AGE concentra una parte relevante del volumen, con contratos de gran tamaño y menor fragmentación. En el bloque autonómico, Madrid lidera el importe adjudicado (cerca de 700 millones) y destaca por un volumen elevado de expedientes (en torno a 990), mientras Andalucía se sitúa a continuación con unos 463 millones y una contratación también intensa. Catalunya y la Comunitat Valenciana completan el grupo de cabeza, con importes que se mueven entre los 230 y 330 millones y un número alto de adjudicaciones (aprox. 1.000–1.400), lo que apunta a un modelo más atomizado. En el extremo contrario, territorios como Navarra o La Rioja apenas superan la decena de millones.

La lectura general confirma que el grueso del gasto se concentra en Madrid, Andalucía y Catalunya, pero también permite ver qué organismos tiran del mercado. Entre los principales licitadores destacan la Agencia Pública Andaluza de Educación (en torno a 90 millones), Informática del Ayuntamiento de Málaga (70 millones) y la Dirección General de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (60 millones). En sanidad, el Servicio Andaluz de Salud aparece con cerca de 40 millones adjudicados, pero con pocos expedientes, un indicador habitual en contratos de mayor alcance y más complejidad.

Áreas con mayor inversión

El desglose por áreas tecnológicas que ofrece TendersTool apunta a un patrón claro: la consultoría y los servicios profesionales concentran la mayor parte del gasto, con alrededor de 400 millones de euros en el primer semestre de 2025. A continuación, aparecen las partidas de hardware y software, con especial peso del almacenamiento y del software de seguridad, que también movilizan importes muy relevantes. El informe subraya, además, que la ciberseguridad sigue ganando protagonismo, con una evolución al alza en los contratos ligados a seguridad en la parte final del semestre. En cambio, ámbitos como radiocomunicaciones o algunos servicios de nube quedan en un plano más discreto. En conjunto, el reparto sugiere que las administraciones están priorizando el “suelo” tecnológico: infraestructura, CPD, continuidad de servicio y protección frente a amenazas.

En el capítulo de tecnologías emergentes, el panorama es igualmente revelador. Aunque la IA ya aparece en una parte significativa de los procedimientos (en torno al 56% de las licitaciones analizadas en 2024), el presupuesto se inclina con más fuerza hacia la automatización (RPA): los contratos de robotización presentan un importe medio un 44% superior al de los proyectos de IA. Las comunidades autónomas concentran buena parte de estas licitaciones por su peso en sanidad, educación y gestión tributaria. Entre los organismos más activos destacan la Generalitat Valenciana, la Consejería de Hacienda de Castilla-La Mancha y el Consorci Mar Parc de Salut de Barcelona, que figuran entre los que más empujan la adopción de IA y RPA en el sector público.

Sanidad digital: millones en historias clínicas y telemedicina

La transformación tecnológica de la sanidad pública se ha consolidado como una de las grandes partidas TIC. En 2024, las administraciones adjudicaron más de 512 millones de euros en tecnología sanitaria vinculada a historia clínica electrónica, gestión de citas, telemedicina y ciberseguridad. Ya en 2025, y tomando como referencia los primeros siete meses, el volumen adjudicado se situaba en torno a 244 millones, por debajo de los 276 millones del mismo tramo del año anterior. Buena parte de las licitaciones se orienta a reforzar la interoperabilidad de la historia clínica (que ya alcanza al 90% de la población), modernizar los sistemas de citación online y renovar el parque tecnológico de hospitales con hardware y software actualizado. Aunque se registran picos de inversión en marzo y mayo, el comportamiento general apunta a una ligera moderación.

El contexto ayuda a explicar por qué estas líneas no se frenan: el envejecimiento de la población y el incremento de los riesgos digitales están empujando la necesidad de teleasistencia más robusta y entornos más protegidos. En 2023, el INCIBE gestionó más de 83.500 incidentes, un 24% más que el año anterior, una cifra que refuerza el giro hacia la seguridad como requisito de base. En el ranking sanitario de 2024, el Servicio Andaluz de Salud aparece como el mayor inversor (86 millones), seguido del SERGAS (53 millones), la Consejería de Sanidad de la Comunitat Valenciana (44 millones) y el Servicio Madrileño de Salud (33 millones). Aunque el cierre completo de 2025 aún está por consolidarse, la conclusión es clara: salud digital y ciberseguridad siguen siendo prioridades estratégicas para las comunidades.

La educación digital: prioridad de Andalucía

Andalucía no destaca solo por el volumen total adjudicado en TIC: también se ha convertido en uno de los territorios que más empuja la digitalización educativa. La Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional puso en marcha licitaciones por unos 207 millones de euros para incorporar dispositivos y aulas digitales interactivas, con el objetivo de extender la enseñanza digital en cualquiera de sus formatos (presencial, a distancia o mixto) y alinearse con el programa de cooperación territorial #EcoDigEdu. La operación, canalizada a través de la Agencia Pública Andaluza de Educación, se apoya en financiación europea de Next Generation EU y el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia. A eso se suma que, en 2024, la Junta ya había licitado 174 millones para la compra de 34.313 paneles digitales y el equipamiento de 38.902 aulas, una inversión de gran escala cuyos resultados y despliegue se siguen consolidando.

Este peso explica que la Agencia Pública Andaluza de Educación figure como uno de los grandes motores de contratación tecnológica del sector público. La estrategia no se limita al equipamiento: se acompaña de iniciativas de formación docente, renovación de entornos digitales y proyectos piloto que exploran el uso de IA en procesos de gestión y apoyo educativo. El resultado, en términos de mercado, es una actividad muy alta, con 1.606 adjudicaciones acumuladas en el periodo, que refuerzan el papel de Andalucía como uno de los polos más activos en tecnología aplicada a servicios públicos.

Hoja de ruta de Madrid

La Comunidad de Madrid está orientando su hoja de ruta digital 2023-2028 hacia pilares muy reconocibles: derechos digitales, despliegue de conectividad 5G, impulso a startups e innovación y un refuerzo sostenido de la ciberseguridad. En ese marco, el foro TIC Trends Madrid 2025 sirvió para poner cifras a una de sus apuestas más visibles: la automatización. La consejera delegada de Madrid Digital, Elena Liria, presentó el Programa Eficiencia IA, que ya funciona con 77 robots de software (RPA). Según los datos expuestos, estas herramientas han permitido superar el millón de transacciones automatizadas, con un ahorro de más de 22.000 horas de trabajo y un retorno de la inversión estimado en menos de 19 meses. A ello se suma el Centro de Automatización Robótica (CAR), que acumula más de 1,5 millones de transacciones y ha liberado 26.000 horas de gestión administrativa.

El mensaje de fondo es claro: la región quiere consolidarse como un banco de pruebas para la automatización y el gobierno del dato, mientras la nube se convierte en infraestructura estructural. En el mismo encuentro se señaló que las prioridades tecnológicas para 2026 girarán en torno a IA, cloud, data governance, ciberseguridad y blockchain. Y, en paralelo, la inversión pública en cloud superó los 700 millones en 2024 y tiende a estabilizarse en 2025. Con proyectos como el Centro de Datos Regional y la digitalización de servicios sociales, Madrid combina iniciativas de alto impacto con una contratación muy activa: su volumen de adjudicaciones (en torno a 600–990, según el corte y la fuente) refleja un modelo dinámico, basado en muchos expedientes de importe medio y despliegue continuo.

AGE, Cataluña y País Vasco

Cataluña está llevando la inteligencia artificial al terreno más sensible: el clínico. El sistema de salud catalán ha activado dos licitaciones para incorporar IA en procesos de alta relevancia asistencial: una herramienta para diagnóstico y seguimiento del ictus (alrededor de 810.000 euros) y otra para la interpretación de radiografías de tórax (en torno a 920.000 euros). Ambas se enmarcan en el programa Salut/IA, con financiación Next Generation, y buscan mejorar la precisión diagnóstica, agilizar la comunicación clínica y facilitar el despliegue de estas capacidades en la red de atención primaria. En paralelo, Cataluña mantiene un perfil alto en la contratación vinculada a IA y RPA, y se sitúan como la comunidad más activa en este tipo de proyectos.

Euskadi, por su parte, avanza con una estrategia de digitalización muy orientada al servicio público y a la identidad digital. A lo largo de 2025, el Gobierno Vasco ha implantado 13 sistemas de algoritmos de IA para agilizar procedimientos y ha ampliado la wallet digital NIK, que permite llevar en el móvil tarjetas y carnés vinculados a distintos servicios. La adopción crece: más de 340.000 personas utilizan ya la tarjeta sanitaria digital a través de NIK. Además, el Ejecutivo prevé presentar después del verano de 2025 sus líneas de IA y gobierno del dato para el sector público, reforzando un ecosistema que también incluye iniciativas de EJIE e Itelazpi para modernizar infraestructuras y avanzar hacia una carpeta ciudadana única.

En paralelo, la agenda nacional está empujando el componente “inteligente” desde otra vía: el territorio. La Secretaría de Estado de Digitalización ha anunciado la convocatoria RedCyTI 2025, dotada con 87 millones de euros, dirigida a ayuntamientos y comunidades uniprovinciales para impulsar ciudades inteligentes. El programa, integrado en el Plan de Impulso a Ciudades y Territorios Inteligentes y financiado con FEDER y recursos propios, prevé proyectos de entre 1,5 y 6 millones para crear laboratorios de innovación, espacios de datos o plataformas de gemelos digitales, y anticipa nuevas convocatorias con capacidad de movilización adicional. En este contexto, el Estado también remarca el esfuerzo en conectividad y la ambición industrial: más de 3.000 millones destinados a desplegar redes y el impulso de la SETT, con una apuesta de 16.000 millones para semiconductores y tecnologías deeptech.

¿Cómo mantenerse al día en el sector público?

Seguir el pulso del sector público no tiene por qué ser una odisea entre boletines, perfiles de contratante y decenas de fuentes distintas. Con TendersTool/AdjudicacionesTIC puedes consultar en un solo lugar las licitaciones y adjudicaciones TIC, saber qué organismos están contratando, en qué categorías y detectar tendencias como IA, ciberseguridad, cloud, sanidad o educación con datos actualizados para anticiparte a oportunidades y movimientos del mercado.